Vamos a ver un poco de la historia de Job, en el capitulo 1 se habla que él lo tenía todo…pero ¿Qué le faltaba?
Dios ve el corazón del hombre y cando nos mira ve a su Hijo formándose en nosotros. Entonces lo que nos hace falta o impide crecer es nuestro pecado,
Y su proyecto es hacedor crecer hasta la imagen de Cristo.
Pero ¿qué pasó con Job? Hubo desgracias, pierde todo lo que tiene, hasta el limite de estar muy enfermo, su esposa le pidió que maldijera a Dios, porque parecia que no habia solución.
Pero que ocurrio, en el capitulo 42, 5
42:4 Oye, te ruego, y hablaré; Te preguntaré, y tú me enseñarás.42:5 De oídas te había oído; Mas ahora mis ojos te ven. 42:6 Por tanto me aborrezco, Y me arrepiento en polvo y ceniza.
Imagina a Job dando gracias “de oidas te habia oído, mas ahora mis ojos te ven” a Dios, es un clamor, una alabanza porque antes Job había oído de él, pero ahora podía verlo, y después fue sanado, restaurado y subió de nivel espiritual y físico.
Job olvidó todo su sufrimiento y compredió que Dios quería que lo viera a él. Job adoraba a Dios sobre un monte de cenizas.
Cuando una persona vé la grandiosidad de Dios, esa persona alaba a Dios, este en la situación que esté, tenga o no tenga.
Job se arrepintió de vivir en lo natural. De ver todo desde la perspectiva terrenal. Por eso debemos crecer en la gracia y en el conocimiento de Dios.
El creyente arrepentido de vivir en lo terrenal, prepara el corazón para aceptar lo que viene de parte de Dios.
predicación Apóstol Roberto Senna
meditación en la palabra Andrés Pascual
Dios ve el corazón del hombre y cando nos mira ve a su Hijo formándose en nosotros. Entonces lo que nos hace falta o impide crecer es nuestro pecado,
Y su proyecto es hacedor crecer hasta la imagen de Cristo.
Pero ¿qué pasó con Job? Hubo desgracias, pierde todo lo que tiene, hasta el limite de estar muy enfermo, su esposa le pidió que maldijera a Dios, porque parecia que no habia solución.
Pero que ocurrio, en el capitulo 42, 5
42:4 Oye, te ruego, y hablaré; Te preguntaré, y tú me enseñarás.42:5 De oídas te había oído; Mas ahora mis ojos te ven. 42:6 Por tanto me aborrezco, Y me arrepiento en polvo y ceniza.
Imagina a Job dando gracias “de oidas te habia oído, mas ahora mis ojos te ven” a Dios, es un clamor, una alabanza porque antes Job había oído de él, pero ahora podía verlo, y después fue sanado, restaurado y subió de nivel espiritual y físico.
Job olvidó todo su sufrimiento y compredió que Dios quería que lo viera a él. Job adoraba a Dios sobre un monte de cenizas.
Cuando una persona vé la grandiosidad de Dios, esa persona alaba a Dios, este en la situación que esté, tenga o no tenga.
Job se arrepintió de vivir en lo natural. De ver todo desde la perspectiva terrenal. Por eso debemos crecer en la gracia y en el conocimiento de Dios.
El creyente arrepentido de vivir en lo terrenal, prepara el corazón para aceptar lo que viene de parte de Dios.
predicación Apóstol Roberto Senna
meditación en la palabra Andrés Pascual