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Pepe R.Castañeda y Pepi Martinez

PREDICACIONES DESTACADAS

miércoles, 25 de junio de 2008

Predicación, jueves 12 de junio, pastor José R. Castañeda


“El hombre, la mujer, a quien Dios busca”

1º juan 1 6 Hubo un hombre llamado Juan, a quien Dios envió 7 como testigo, para que diera testimonio de la luz y para que todos creyesen por medio de él.8 Juan no era la luz, sino uno enviado a dar testimonio de la luz. 9 La luz verdadera que alumbra a toda la humanidad venía a este mundo.
Como introducción veremos algo sobre la palabra “manipular”, que es movernos juntos para mí beneficio”, y la palabra “motivar” que es, movernos juntos para nuestro beneficio, por eso hay que motivar al pueblo de Dios, no manipular.
Se trata de seguir y servir a Jesús. En éste sentido podemos ver a qué tipo o a quién usa Dios para servirle.
-Dios usa a quien él llama a su servicio no a los que se envían por sí solos, no a los que inventan su llamado.
No es malo querer servir a Dios, todo lo contrario es algo buenísimo, pero si es malo querer hacerlo por motivos egoístas, para mi propio beneficio.
Dios capacita y favorece a las personas que él llama, pero desaprueba a los que van en su nombre, y no han sido llamados por él “Jeremías 14:16”.
El servidor debe tener conciencia de vocación, que ha sido llamado por Dios.
Podemos hacernos algunas preguntas claves para nuestro ministerio o servicio
-¿creo que Dios me ha llamado para servirlo?
-¿cómo va mi vida espiritual?
-¿crezco espiritualmente?
-Dios usa a los que están dispuestos a desgastarse por él, no a personas cómodas.
La antorcha debe quemarse para dar luz, así es nuestra vida, debe haber un esfuerzo para Dios, nuestra vida debe estar prendida por él.
Todos quieren brillar, pero sin desgastar sus vidas, quieren logros importantes, pero no sufrir. Pero los que sirven a Dios no son irresponsables, dan todo sin reservas, entregan su vida al Señor, ¿estoy dispuesto a pagar el costo de servirle?
-Dios usa al que está dispuesto a glorificarle a él, no lucimiento de la persona, el servicio de una manera u otra, va a ser lo que soy. ¿Cómo sirvo a Dios? ¿Con ganas?, ¿con amor?, ¿lo doy todo por él? Así será mi vida. Dale toda la gloria a Dios en tu servicio, pues el busca a tales personas.

meditación en la palabra del Pastor: José R. Castañeda
publicado por: Andrés Pascual Vela