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Pepe R.Castañeda y Pepi Martinez

PREDICACIONES DESTACADAS

domingo, 9 de septiembre de 2012

EL PERDON NOS LIBERA Y TRANSFORMA. ENVIDIA, CELOS, ECT. Parte, III


 

 












COLABORARON EN EL DESARROLLO DEL CULTO:

JOAQUIN LOPEZ: PRESENTO Y ORO PONIENDO TODO EN MANOS DEL SEÑOR, ANIMANDO A LA IGLESIA A UN ENCUENTRO CON DIOS ALABANDOLE Y ADORANDOLE. (SALMO, 32:10-11)

SALMO, 32:10-11 10 Muchos dolores habrá para el impío; Mas al que espera en Jehová, le rodea la misericordia. 11 Alegraos en Jehová y gozaos, justos; Y cantad con júbilo todos vosotros los rectos de corazón.

PEPI MARTINEZ: NOS ANIMO A OFRENDAR PARA SER PARTE DE LO QUE EL SEÑOR ESTA HACIENDO (MARCO, 12:41).

MARCOS, 12:41-44 41 Estando Jesús sentado delante del arca de la ofrenda, miraba cómo el pueblo echaba dinero en el arca; y muchos ricos echaban mucho. 42 Y vino una viuda pobre, y echó dos blancas, o sea un cuadrante. 43 Entonces llamando a sus discípulos, les dijo: De cierto os digo que esta viuda pobre echó más que todos los que han echado en el arca; 44 porque todos han echado de lo que les sobra; pero ésta, de su pobreza echó todo lo que tenía, todo su sustento.
ADELA MANJON: HIZO LA INTRODUCCION A LA PALABRA. (ROMANOS, 12:2)

ROMANO, 12:2 No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.
ANA GOMEZ: NOS DESPIDIO DANDO GRACIAS AL SEÑOR POR TODO

















PILAR GONZALEZ COMPARTIO UNA PALABRA QUE SINTIO DEL SEÑOR PARA UNA PERSONA QUE ASISTIO AL CULTO PALABRA DE COMPASION Y CONSOLACION DEL SEÑOR, LA PERSONA SE SINTIO BENDECIDA Y DIOS GRACIAS A DIOS.









Domingo, 09 Septiembre de 2.012
EL PERDON NOS LIBERA Y TRANSFORMA. ENVIDIA, CELOS, ECT.
Parte, III


CUANDO EL PERDON TRANSFORMA NUESTRO CORAZON.

Génesis 45:1-16 1 No podía ya José contenerse delante de todos los que estaban al lado suyo, y clamó: Haced salir de mi presencia a todos. Y no quedó nadie con él, al darse a conocer José a sus hermanos. 2 Entonces se dio a llorar a gritos; y oyeron los egipcios, y oyó también la casa de Faraón. 3 Y dijo José a sus hermanos: Yo soy José; ¿vive aún mi padre? Y sus hermanos no pudieron responderle, porque estaban turbados delante de él. 4 Entonces dijo José a sus hermanos: Acercaos ahora a mí. Y ellos se acercaron. Y él dijo: Yo soy José vuestro hermano, el que vendisteis para Egipto. 5 Ahora, pues, no os entristezcáis, ni os pese de haberme vendido acá; porque para preservación de vida me envió Dios delante de vosotros. 6 Pues ya ha habido dos años de hambre en medio de la tierra, y aún quedan cinco años en los cuales ni habrá arada ni siega. 7 Y Dios me envió delante de vosotros, para preservaros posteridad sobre la tierra, y para daros vida por medio de gran liberación. 8 Así, pues, no me enviasteis acá vosotros, sino Dios, que me ha puesto por padre de Faraón y por señor de toda su casa, y por gobernador en toda la tierra de Egipto. 9 Daos prisa, id a mi padre y decidle: Así dice tu hijo José: Dios me ha puesto por señor de todo Egipto; ven a mí, no te detengas. 10 Habitarás en la tierra de Gosén, y estarás cerca de mí, tú y tus hijos, y los hijos de tus hijos, tus ganados y tus vacas, y todo lo que tienes. 11 Y allí te alimentaré, pues aún quedan cinco años de hambre, para que no perezcas de pobreza tú y tu casa, y todo lo que tienes. 12 He aquí, vuestros ojos ven, y los ojos de mi hermano Benjamín, que mi boca os habla. 13 Haréis, pues, saber a mi padre toda mi gloria en Egipto, y todo lo que habéis visto; y daos prisa, y traed a mi padre acá. 14 Y se echó sobre el cuello de Benjamín su hermano, y lloró; y también Benjamín lloró sobre su cuello. 15 Y besó a todos sus hermanos, y lloró sobre ellos; y después sus hermanos hablaron con él. 16 Y se oyó la noticia en la casa de Faráon, diciendo: Los hermanos de José han venido. Y esto agradó en los ojos de Faraón y de sus siervos.


Los recuerdos que nos causan dolor son los causantes de muchos de nuestros males presentes y del estado de diligencia o quietud con la que nos desenvolveremos en la vida en el futuro. Sorprende la cantidad de hombres y mujeres en todo el mundo que viven atados al pasado, sujetos a incidentes o escenas que resultaron especialmente traumáticos. En la Biblia aprendemos no solamente que es posible ser sanados de nuestros recuerdos sino también, asumir una actitud de fe y mucho más positiva frente a las adversidades que van a surgir en nuestro camino.

I.- El amor de José no se apagó a pesar del daño físico y emocional que le provocaron sus hermanos (vv.1, 2).

1.- En José prevaleció el amor antes que los recuerdos del pasado (v. 1).

2.- La fuerza de un corazón que ama, como el de José, estaba por encima de las circunstancias vividas (v. 2).

II.- José miró las adversidades como un proceso dentro del plan y propósito eterno de Dios (vv.3-8).

1.- José pudo mirar sin rencor a sus hermanos (v. 3).

2.- José pudo mirar al pasado sin dolor (v. 4).

3.- José tenía claro que su vida –en Dios—tenía un propósito (v. 5).

a.- Encontraba que estaba cumpliendo una misión (v. 6).

b.- José se presentó como instrumento de bendición para quienes le causaron daño (v. 8).

III.- José se dispuso a emprender una nueva vida, sanado de sus recuerdos (vv.9-16)

1.- José se convirtió en vehículo de bendición para sus hermanos, a quienes había perdonado (vv.9-13).

2.- La sanidad de los recursos llevó a José a tratar con amor a sus hermanos (vv.14-16).

3.- Usted y yo podemos ser sanados de nuestros recursos, si como José, sometemos todo nuestros recuerdos en manos de Dios.

José es una prueba preciosa de que, con el poder de Dios, es posible salir de la etapa traumática que representan los recuerdos traumáticos. El poder se mueve poderosamente en nuestro ser cuando le permitimos al Señor Jesucristo que tome control de todas las áreas de nuestra vida. Cuando lo hacemos así, el cambio que se produce es sorprendente...

Meditación en la Palabra: Pastor Pepe R. Castañeda.