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Pepe R.Castañeda y Pepi Martinez

PREDICACIONES DESTACADAS

lunes, 25 de octubre de 2010

TENGAMOS ARMONIA EN LA IGLESIA

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DAMOS GRACIAS A DIOS POR LOS COMPONENTES DEL GRUPO DE ALABANZA Y ORAMOS AL SEÑOR PARA QUE LOS CONSOLIDE EN EL SITIO DEL MURO DONDE EL LOS HA PUESTO PARA QUE SE MANTENGAN EN PERFECTA COMUNION CON DIOS Y EL ENEMIGO NO CONSIGA QUITARLOS DE SU LUGAR DE Y MINISTERIO.
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DAMOS GRACIAS A DIOS TAMBIEN POR LOS QUE COLABORAN EN EL CULTO DESARROLLANDO TAREAS MINISTERIALES. ORAMOS TAMBIEN POR ELLOS PARA PERMANEZCAN EL EL MURO, SIRVIENDO A DIOS.
LA PRESENTACION Y ORACION ESTUBO A CARGO DE JOAQUIN LOPEZ () LA PETICION Y ORACION POR LA OFRENDA LA HIZO RAMON HERNANDEZ (GENESIS, 4) LA INTRODUCCION A LA PALABRA PEPI MARTINEZ (1 REYES, 19:19) Y NOS DESPIDIO EN ORACION ANA GOMEZ DANDO GRACIAS A DIOS POR TODO Y EN TODO.
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DIERON TESTIMONIO PARA DARLE LA GLORIA A DIOS, ADELA MANJON POR EL RETIRO DE MUJERES QUE ORGANIZO LA IGLESIA PALABRAS DE PODER COSTA DEL SOL EN MIJAS DONDE ASISTIERON LAS HERMANAS DE LA IGLESIA.
PACO ASENSIO DIO TESTIMONIO DE LO QUE DIOS ESTA HACIENDO EN EL Y A TRAVES DE EL EN OTRAS PERSONAS.
PEPE R. CASTAÑEDA PEPI MARTINEZ DIERON TESTIMONIO DEL VIAJE QUE HICIERON A MIJAS A LA CONFERNACIA DE MUJERES.
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Domingo, 24 de Octubre de 2.010
TENGAMOS ARMONÍA EN LA IGLESIA
Filipenses 2:1-8 1 Por tanto, si hay alguna consolación en Cristo, si algún consuelo de amor, si alguna comunión del Espíritu, si algún afecto entrañable, si alguna misericordia, 2:2 completad mi gozo, sintiendo lo mismo, teniendo el mismo amor, unánimes, sintiendo una misma cosa. 2:3 Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo; 2:4 no mirando cada uno por lo suyo propio, sino cada cual también por lo de los otros. 2:5 Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús, 2:6 el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, 2:7 sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; 2:8 y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. 2:9 Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, 2:10 para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; 2:11 y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre. 2:12 Por tanto, amados míos, como siempre habéis obedecido, no como en mi presencia solamente, sino mucho más ahora en mi ausencia, ocupaos en vuestra salvación con temor y temblor, 2:13 porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad. 2:14 Haced todo sin murmuraciones y contiendas, 2:15 para que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin mancha en medio de una generación maligna y perversa, en medio de la cual resplandecéis como luminares en el mundo; 2:16 asidos de la palabra de vida, para que en el día de Cristo yo pueda gloriarme de que no he corrido en vano, ni en vano he trabajado. 2:17 Y aunque sea derramado en libación sobre el sacrificio y servicio de vuestra fe, me gozo y regocijo con todos vosotros. 2:18 Y asimismo gozaos y regocijaos también vosotros conmigo.
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l. Introducción
A. Los creyentes eran de un mismo sentir
1. Oraban con gran fe (Hch. 1:14).
2. Predicaban con gran poder (Hch. 2:1).
3. Disfrutaban de un gran compañerismo (Hch. 2:41-46).
4. Experimentaron un gran crecimiento (Hch. 2:47).
B. Pablo alienta a la iglesia filipense a que sea de un mismo sentir
1. Si hay alguna consolación en Cristo.
2. Si algún consuelo de amor.
3. Si alguna comunión del Espíritu.
4. Si algún afecto entrañable y misericordia.
C. Cómo tener armonía en la iglesia
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II. Meditación
A. Nada hagamos por contienda o por vanagloria (v. 3)
1. Terminar con las contiendas (rivalidad y egoísmo) da nueva vida a la iglesia.
2. La contienda tiene malas compañías.
a. Aparece junto con la envidia, las disensiones y la carnalidad (1 Co. 3:3).
b. Se menciona junto con las obras de la carne (Gá. 5:19-21).
c. Procede de Satanás (Stg. 3:14-16).
3. El servicio que glorifica al siervo no vale nada.
4. Toda actividad en la iglesia debería glorificar a Dios (Col. 3:23).
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B. Consideremos a los demás como superiores a nosotros mismos (v. 3)
l. Tenemos aquí una dimensión diferente de la estima propia.
a. Este es el mejor estímulo para un amor propio correcto.
b. Pablo nos llama a tener un alto concepto de los demás.
2. El aprecio por los demás surge del amor.
a. El amor nos capacita para olvidar las faltas de otros.
b. Cuando edificamos sobre las fallas (geológicas) debemos esperar un terremoto.
c. El amor de Dios nos habilita para ver lo mejor en los demás.
3. Esta estima nos lleva a interesamos por las necesidades de los demás (v. 4).
a. Nuestra preocupación por ellos es superior a la de por nosotros mismos.
b. Queremos protegerlos a ellos y a lo que es valioso para ellos.
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C. Haya en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús (v. 5)
1. Esta es la clave para prestar atención al llamamiento de Pablo.
a. Para eliminar la contienda y la vanagloria.
b. Para considerar a otros mejores que nosotros mismos.
c. Para cuidar más por las cosas de otros que por las nuestras.
2. La mente (la actitud) de Cristo conquista y vence la carnalidad.
a. Nos hace humildes en vez de odiosos.
b. Nos lleva a dar en vez de codiciar.
c. Nos hace generosos en vez de egoístas.
3. Aprendemos acerca de la mente de Cristo en la cruz.
a. Dejó a un lado su gloria; ¿cómo podemos buscar nuestra propia gloria?
b. Se humilló a sí mismo; ¿cómo podemos ser orgullosos?
c. Se hizo siervo de todos; ¿cómo podemos nosotros codiciar elevadas posiciones?
d. Fue obediente hasta la muerte; ¿cómo podemos noso¬tros hacer menos?
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III. Conclusión
A. La exaltación sigue a la humildad (vv. 9 y 10)
B. Una iglesia humilde y amorosa será una iglesia unida
C. Una iglesia unida será eficaz en su ministerio

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Salmo 133 1 ¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los hermanos juntos en armonía! 133:2 Es como el buen óleo sobre la cabeza, El cual desciende sobre la barba, La barba de Aarón, Y baja hasta el borde de sus vestiduras; 133:3 Como el rocío de Hermón, Que desciende sobre los montes de Sion; Porque allí envía Jehová bendición, Y vida eterna.
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Meditacion en la Palabra: Pastor Pepe R. Castañeda.
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